Distintos jueces del Tribunal Supremo se han mostrado críticos ante la iniciativa del Gobierno de incrementar hasta los 72 años la edad de jubilación y de eliminar de forma paralela la figura del magistrado emérito.
Consideran que la iniciativa les aboca a trabajar "hasta sus últimos días" para así obtener un mínimo incremento en la pensión, de un 4% en el mejor de los casos.
La novedad pasará a incluirse en el Proyecto de Ley Orgánica del Poder Judicial después de que el grupo parlamentario del PP en el Senado haya presentado varias enmiendas en este sentido. Ver la noticia completa